Es una manera mas eficaces de conocerme, pues a medida que escribo y leo lo que de mí sale me doy cuenta de cosas de las que antes no me caía el veinte.
Me percibo hablando o mejor dicho escribiendo sobre un tema dejándome ir como hilo de media diría mi abuelita.
Me gusta como a todos yo creo, poder expresarme libremente, decir lo que siento y pienso sin tener que pasar ningún tipo de juicio sobre ello y también me agrada mucho el poder leer y escuchar las diversas maneras de pensar de mis hermanas de tinta acerca del mismo tema, darme cuenta que en ocasiones no solo yo pienso de esa manera de tal tema, o escuchar algo que no me habría pasado por la cabeza y tener alternativas también en ocasiones para resolver algún conflicto interno, pues creo firmemente que es una verdadera terapia grupal lo que aquí hacemos, en la que ocasionalmente debemos pagar con lágrimas, risas, carcajadas, lamentos, incógnitas y muchos sentimientos más. El desnudar nuestra parte oculta a otros, incluso a nosotras mismas, pero en la que hemos creado un ambiente propicio para hacerlo sin pena ni culpa, sin ninguna remuneración económica ni interés de por medio que no sea comunicar y empatizar.
Punto y aparte es que de pilón y como cereza del pastel nos lean. Que haya personas tomándose un momento de su tiempo para hacerlo no tiene precio.
Personalmente al principio yo estaba dudosa de que esto funcionara por la diversidad de ocupaciones que cada una tiene y los escasos espacios de tiempo, creí que fracasaría pero quien nos viera ya cumpliendo un año de reunirnos sin cesar.
De dinámicas que conjuntamente hemos propuesto para los temas que a cada una nos resuenan.
Somos mujeres especiales, un número reducido en la que cada una tiene un lugar y rol dentro de esto con sus propios dones recursos talentos y tiempos que se invierten, que cada una valoramos de corazón , que finalmente suman a esta terapia tan despresurizadora.
Ojalá este emprendimiento siga, para continuar expresándonos, hermanándonos y alimentándonos mutuamente. Es una bonita forma de decirnos que nos queremos y anhelamos siempre el próximo lunes de “cafecito emocional “