Entre copas él se dió cuenta, que a veces la percepción de lo que vemos no es real. Esa meretriz valía mucho más de lo que aparentaba, valía la pena hasta la última gota.
La sacó de ese pantano donde todas las demás se hunden. Comenzó sonriendo de otra manera a su nueva vida, a esa oportunidad que hoy el destino le obsequiaba.
Sion